SAN JUAN EN OPORTO: UNA CELEBRACIÓN LLENA DE TRADICIÓN
SAN JUAN EN OPORTO: UNA CELEBRACIÓN LLENA DE TRADICIÓN
Si hay una noche en la que Oporto realmente cobra vida, es la noche de São João. Del 23 al 24 de junio, la ciudad se transforma en una gran fiesta al aire libre con música a raudales, baile, sardinas a la parrilla, globos en el cielo y, por supuesto, los famosos martelinhos.
San Juan es el santo más querido por los portugueses, y también el más divertido. Las festividades empiezan temprano y terminan al amanecer del día siguiente. Desde Ribeira hasta Foz, todo es una excusa para celebrar.
El origen de la fiesta
Los orígenes del Día de San Juan combinan tradiciones paganas con creencias cristianas. Mucho antes de que se hablara de santos, esta era una noche mágica marcada por el solsticio de verano, el día más largo del año. Se celebraba la naturaleza, la fertilidad y la abundancia. Se encendían hogueras para alejar los malos espíritus y atraer la buena suerte.
Con el tiempo, y con la influencia del catolicismo, la festividad comenzó a honrar el nacimiento de San Juan Bautista, que se celebraba el 24 de junio. Pero las hogueras, los rituales y el misticismo de la noche continuaron. Y hoy, todo esto forma parte del encanto de esta singular celebración.
El encanto de São João en Oporto y sus tradiciones
Quienes viven São João en Oporto saben que esta fiesta permanecerá en sus recuerdos para siempre. La celebración suele comenzar con una sabrosa sardina en pan en Fontainhas, un verdadero ritual que reúne a lugareños y visitantes para abrir el apetito y sumergirse en el espíritu de la noche. Entre risas y bromas, la gente se golpea la cabeza con puerros o los famosos martillos de plástico, un gesto divertido que simboliza buena suerte.
Cuando llega la medianoche, todo el mundo dirige la mirada al cielo para contemplar los emblemáticos fuegos artificiales sobre el puente D. Luís, un espectáculo de luz y color que deja a todos boquiabiertos.
Las festividades continúan con un animado paseo desde Ribeira hasta Foz, pasando por Miragaia y otros puntos emblemáticos de la ciudad. A lo largo del camino, hay bailes, música y el encanto de los globos de papel que se elevan e iluminan el cielo, creando una magia colectiva que solo São João do Porto puede ofrecer.
Y para los más resistentes, la fiesta sólo termina de madrugada, muchas veces junto al Castelo do Queijo, donde aún se puede sentir la energía vibrante de esta noche inolvidable.
Vila Foz Hotel & Spa: donde la ciudad se encuentra con el mar
Tras una noche intensamente vivida en las calles de Oporto, no hay nada como dejarse llevar por la brisa atlántica y el silencio de Foz. En Vila Foz Hotel & Spa, el ritmo se calma, el cuerpo descansa y el alma sigue bailando, con recuerdos de una fiesta que solo Oporto puede ofrecer.
Aquí, entre el mar y la ciudad, São João adquiere un nuevo encanto: la calma que llega después de la celebración.